Pequeño cuento para el Año Nuevo.
Un hombre entró en un local y preguntó al señor del mostrador:
• Señor, ¿que se vende aquí?
• Lo mejor de lo mejor, le respondió.
• ¿Cuánto cuesta? volvió a preguntar.
• ¡Nada! ¡Aquí todo es gratis!
El hombre miró por las estanterías y vio que había jarros de amor, frascos de fe, paquetes de esperanza,, fardos de perdón, cajas grandes de paz y muchos otros dones.
El hombre, maravillado con todo aquello, pidió:
• Por favor, póngame el mayor jarro de amor, todos los fardos de perdón y un frasco grande de fe. Ah!, y dos cajas de paz.
El vendedor preparó todo y le entregó un pequeño paquetito que cabía en la palma de su mano.
Incrédulo, el hombre dijo:
• Pero, ¿cómo puede estar aquí todo lo que pedí?
Sonriendo, le respondió:
• No vendemos frutos. Sólo semillas. ¡Plántelas!
*Sembrar, es el mensaje de ahora en adelante, dependiendo de tu siembra será la cosecha en tu vida…*
FELIZ AÑO NUEVO!!!!