Hoy tenemos un testimonio múltiple.. La Familia Guijosa Campos, muy unida desde siempre al Instituto, nos comparten algo de lo que para ellas es la Alianza. Las cuatro hijas de Conchita participaron desde muy niñas en los movimientos juveniles del Instituto. Paloma, la segunda de las hermanas goza ya de la presencia del Señor desde hace unos años. Un testimonio familiar que nos habla de lo importante que es el apostolado familiar en nuestro Instituto.
Su tía María, hermana de Conchita es aliada, y siempre ha estado trabajando por la difusión del carisma sobre todo con la niñez y la juventud. Por la inocencia de los niños, la castidad de los jóvenes, la fidelidad de los esposos y la virginidad fecunda de las personas consagrados.