En esta ocasión, Francisco se dirige a todos los católicos para que miren a su alrededor y observen a cada uno de los sacerdotes de nuestras comunidades, profundizando sobre el hecho de que la santidad hace siempre menos ruido que el pecado y el escándalo.
Dirigir la mirada a los sacerdotes y orar por ellos
«Quiero pedirles que dirijan su mirada a los sacerdotes que trabajan en nuestras comunidades. No todos son perfectos, pero muchos se la juegan hasta el final ofreciéndose con humildad y alegría. Son sacerdotes cercanos, dispuestos a trabajar duro por todos. Demos gracias por su ejemplo y su testimonio», dice el Papa en el video.
El trabajo duro de los sacerdotes, lejos de ser siempre perfecto, pone en juego cada día el esfuerzo humilde y alegre, que busca hacer comunidad y acercarse cada vez más a los miembros del pueblo de Dios. Desean seguir el estilo de la vida de Jesús, con cercanía y disponibilidad hacia la gente, especialmente a los más pobres. En palabras del Santo Padre: “Siervo de la vida, camina con el corazón y el paso de los pobres; se hace rico por el trato frecuente con ellos”.
Comprometidos en una solidaridad activa
Asimismo, Francisco da gracias por el ejemplo de los sacerdotes, que con su disponibilidad y cercanía dan testimonio del Amor de Cristo e invita a rezar por ellos, para que, “con la sobriedad y la humildad de sus vidas, se comprometan en una solidaridad activa, sobre todo, hacia los más pobres”.