Sábado 20, el Inmaculado Corazón de María.
«La Purísima, que huella la tierra y mira al cielo,
bebe en las alturas la vida divina
y se repliega de sí misma para sentirla
y vivirla intensa y fecunda.
Su corazón virginal es el santuario de esa vida»
A. Amundarain n° 2109 Semillas de Vida