Nuestra historia comienza en las montañas de Pietrelcina, un pequeño pueblo en el sur de Italia. Pronto nos encontramos con el joven Francis, el personaje principal de nuestra historia, que reúne el pequeño rebaño de ovejas de sus padres. Él es muy querido por los perros pastores, así como una oveja considerable, y juegan juntos siempre que pueden. Él es muy amable con ellos, aunque gruñón con los niños y adultos de la aldea que, a medida que pasa el tiempo, lo consideran un «buen tipo», aunque un poco solo.