PRIMER DOMINGO DE ADVIENTO
Inauguramos un tiempo nuevo, tiempo de ser vigías, de descubrir, como profetas, la esperanza que va a germinar…ESTÁ CERCA.
Adviento nos llama a discernir a Dios con perseverancia.
A tener encuentros íntimos con el Señor para que nos transforme la mirada y que renazca, en lo cotidiano, lo sagrado.
¿Tendremos que cambiar algo, en cada uno, para que sea posible ese «nuevo» nacimiento?
¡Seguro, Él está cerca!





